Hoy me puse a limpiar mi estantería por millonésima vez y me di cuenta que algunos de mis libros ya se están haciendo viejitos, sus hojas se están volviendo amarillentas y eso sucede por varias razones: una es por los ácidos y todos los químicos que le ponen al papel cuando lo están haciendo, y otra es por el polvo que se va acumulando con el tiempo, la humedad o el calor a los que los exponemos, etc... Entonces me puse a pensar cómo le podía hacer para proteger mis libros un poco más y recordé que cuando los venden, la mayoría vienen envueltos en plástico. Y si bien es cierto que no es tan fácil conseguir una máquina que los selle con plástico y calor, se me ocurrió una forma que es realmente económica y fácil de hacer para protegerlos mejor.
Los único que necesitan es papel film o papel de cocina transparente o plástico de cocina (que todos son lo mismo), cutter, exacto, tijeras o algo para cortar el plástico, y sus libros. También necesitarán una mesa o superficie de trabajo que sea de vidrio.
Lo bueno de este plástico es que se pega por sí solo y no se necesita ningún tipo de cinta o pegamento, y por eso mismo les recomiendo que usen una superficie de vidrio, pues igual se adhiere a él y les puede servir como una forma de sostener el plástico mientras lo manipulan para envolver su libro. Además de que se estira y puede amoldarse perfectamente a la forma de sus libros y así lograr que se cubran por completo, e igualmente se puede quitar muy fácil por si los quieren releer.
Y para evitar que se peguen los libros unos con otros cuando ya estén envueltos, sólo necesitan talco para bebé y un paño seco.
Cuando junten sus libros verán que no se quedan pegados entre sí por el plástico, sino que se deslizan como si nada ;)
Es una forma fácil, rápida y económica de proteger sus libros y seguirán viéndose como si nada e igual de hermosos como el primer día que los compraron :D
(Y seguramente no tendrán que limpiarlos tan seguido, jejeje).
(Y seguramente no tendrán que limpiarlos tan seguido, jejeje).